La Filmoteca del Terrario

jueves, 26 de abril de 2012

"EL CUARTO PROTOCOLO" para Ultramundo


Un entretenido thriller de los 80 con sabor a añeja "guerra fría" con la sección de curiosidades a cargo de Fernando Cuesta.

Activen el cuarto protocolo AQUÍ.

sábado, 21 de abril de 2012

"EL CONDE DRÁCULA" (revisado) para Ultramundo


Hace ya algún tiempo publiqué en este blog un comentario sobre la adaptación de "Drácula" acometida por Jesús Franco. Una adaptación que se jactaba de ser fiel a la novela de Bram Stoker, fallecido justamente hace 100 años. En conmemoración de esta efemérides, he revisado y ampliado mi post con destino a Ultramundo.

Pónganse negros como Drácula, que diría Mickey Rourke en "Los Mercenarios" e hinquen el diente aquí.

viernes, 20 de abril de 2012

"MARGIN CALL" para Ultramundo

Mi nueva reseña para Ultramundo se centra en un más que interesante título centrado en las primeras horas de la crisis económica mundial en la que nos encontramos en estos momentos. Con decirles que Kevin Spacey y Jeremy Irons vuelven a ser actores después de años metidos en mediocridades varias, ya pueden imaginarse si merece la pena echar un vistazo a la cinta. Aparte de la reseña de la película, también tienen "making of" y comentario sobre el DVD.

Para leer todo esto, hagan clic AQUÍ.

viernes, 13 de abril de 2012

Making of "JASON X" para Ultramundo

En este Viernes 13 tan encantador, nada mejor que revisar las andanzas de Jason Voorhees por el espacio sideral. Miguel Ángel Muñíz Menéndez disecciona por la barba la cinta mientras servidor cuenta el anecdotario y curiosidades de rigor.

Despeguen a machetazos aquí.

lunes, 9 de abril de 2012

Un repaso corto a la larga carrera (oficial) de Prince Rogers Nelson (2001-2010)

THE RAINBOW CHILDREN (2001) Una vez "de vuelta" con su nombre y tras entretenerse durante el año 2000 en publicar temas por Internet y estudiar la Biblia con los Testigos de Jehová, Prince decide volver a sus raíces funkys y jazzies. Pero no será en un álbum convencional, sino en su propia oda a la secta contraria a las transfusiones de sangre. De eterno debate por el contenido de las letras y tildado de obra maestra/bodrio dependiendo al fan de Prince que pregunte, para mí un grandioso disco donde el de Minneapolis aparta las "maquinitas" y vuelve a un sonido más orgánico para un álbum conceptual sobre la eterna lucha entre el bien y el mal. Aunque bien podría haberse desprendido de la voz del narrador distorsionada que recorre el disco, en él encontramos temas de elevada calidad del calibre del homenaje a James Brown (y van...) The Work Pt.1, experimentos afortunados como Digital Garden, la pegadiza y reminiscente del Erotic City 1+1+1 is 3, las baladas con clase Muse 2 the Pharaoh y Mellow, el tema romántico dedicado a su nueva mujer Manuela Testolini She Loves Me 4 Me, la energía reivindicativa de Family Name, la marchosa reflexión sobre sí mismo The Everlasting Now (impagable el momento en el que la voz aflautada de un fan dice que ojalá Prince volviera a hacer música como la de antes...para ser respondido con un sonoro hostión) y, como colofón, el épico The Last December que forma parte de una especie de trilogía junto con Purple Rain y Gold con estructura parecida a la de estos dos temas. ¿El último disco redondo del todo del pequeñín? Quizás. La posterior gira One Nite Alone que quedaría registrada en un triple CD y un DVD en Las Vegas devolverían bastante prestigio a Prince con más de uno apuntando a un posible comeback por todo lo alto de cara a un futuro cercano.

MUSICOLOGY (2004) Don't u miss the feelin' music gave ya/back in the day? La pregunta era bastante apropiada en los tiempos más basurescos musicalmente hablando para la generación criada por American Idol, O.T. o la MTV de ahora, críos que en la mayoría de los casos no se preocupan del glorioso pasado musical en el que vivían sus padres, y no sólo de música negra me temo. También es bastante posible que la pregunta se la hiciera a sí mismo y estuviera cansado de tanta independencia publicando discos instrumentales y canciones por Internet  y de ser "agua pasada". Así que, aliándose con Columbia Records y con temas comerciales y de confección artesanal old school, parecía que estábamos de vuelta a 1984 cuando Prince era el que cortaba el bacalao. Un gran triunfo en ventas como nunca tuvo desde Diamonds and Pearls, actuaciones estelares en los Grammys y el Hall of Fame y una gira histórica le inscribieron en la leyenda. Los highlights incluían temas tan animados como Musicology o Life O' The Party, buenas canciones rockeras como A Million Days o Cinnamon Girl, baladas como en los viejos tiempos del calibre  de Call My Name (otra oda a Manuela Testolini) u On The Couch, recuerdos del Sign O' The Times como What Do U Want Me 2 Do?, reflexiones sobre la era Bush y el mundo en general como Dear Mr. Man (lástima que se haga corto el tema) y el brillante cierre acústico Reflection. Un ejercicio nostálgico y triunfante en lineas generales.

3121 (2006) Y después de ser declarado oficialmente una leyenda y sin nada que demostrar a estas alturas, ¿a vivir de las rentas sin esforzarse? Pues sí. O no, al menos en este caso en particular. Otros 12 temas como en Musicology destinados a triunfar aunque con algo más de riesgo como puede atestiguar el single Black Sweat, una vuelta a la máxima de menos es más de Kiss y que, sin llegar a la altura del tema ochentero, sí que acaba resultando un buen homenaje al sonido Minneapolis. Contra todo pronóstico, el tema latino Te Amo Corazón que en un principio prometía descojone a su costa acaba resultando una agradable sorpresa. Himnos rockeros como Fury, el elegante sobrante de Musicology Satisfied, el dueto con el proyecto de estrella Tamar (a la que las lenguas viperinas achacan el divorcio de Prince con Manuela Testolini) en Beautiful, Love & Blessed, el muy superior remix del tema de desamor publicado originalmente en Internet The Dance, la divertida Lolita, el r&b de probada eficacia The Word, el muy groovy tema que da título al disco o el cierre apocalíptico a ritmo de funky juguetón Get on the Boat son lo más destacado de un disco que gana con el tiempo y con el que su autor logró ser número 1 en ventas después de mucho tiempo. Concretamente desde Batman en 1989.

PLANET EARTH (2007) Y tras seguir siendo una leyenda, ¿a vivir de las rentas sin esforzarse? Ahora sí que sí, aunque Prince no olvide su toque de contestatario de la industria musical al regalar el disco en Gran Bretaña a través de un periódico. Y miren que el pequeñín tenía toda la buena intención del mundo con temas como Planet Earth, Mr. Goodnight, The One u Wanna C, Future Baby Mama o Resolution. Pero éstos resultan fallidos y/o muy flojos en lineas generales. Añadan que el single Guitar es pasable siendo benévolo y ya podemos añadir el álbum a la categoría de "poco recomendable". No obstante, cuatro son las joyas que hay que rescatar, empezando por la balada old school Somewhere Here On Earth, donde es imposible resistirse al falsete del de Minneapolis. O la demasiado corta para mi gusto All the Midnights in the World. O el funky de alta categoría Chelsea Rodgers. O el mejor tema del disco y retorno rockero con Wendy & Lisa Lion of Judah, el cual justifica por si solo la compra del mismo. Desde ya, clásico inapelable de Prince. El libro de fotografías + CD de sus actuaciones en Londres 21 Nights-Indigo Nights resulta ser de lo más destacable de esta época, aunque sólo aquellos sobrados de recursos económicos puedan permitirse el capricho.

LOTUS FLOW3R/ MPLSOUND (2009) Sin aprender de su fiasco con Crystal Ball, Prince insiste en Internet para vender otro triple CD aunque aquí comente dos al ser el tercero, Elixir, de su protegida y amante Bria Valente (tampoco se pierden mucho, la verdad). Otro fiasco en la red de redes que sirve para que sus fans se reboten aún más con él entre esto y su absurda política de censurar videos y actuaciones suyas por portales de videos. Ciñéndonos a la música, Lotus Flow3r es algo mejor que lo ofrecido en Planet Earth aunque tampoco sea para tirar cohetes. Encontramos gran calidad en su versión de Crimson & Clover, la excelente 4ever, la reminiscente de Purple Rain Colonized Mind, la infravalorada Love Like Jazz, el divertido $ o el homenaje a Hendrix que supone Dreamer. Aparte de eso, poca chicha que sacar salvo por temas que mejoran en directo como Feel Good, Feel Better, Feel Wonderful. El resto, manifiestamente mejorable. Como lo es el MPLSound, bienintencionado homenaje a sí mismo y al sonido que popularizó pero que acaba siendo un disco previsible y hecho sin energías creativas en lineas generales que hace bueno al Planet Earth y todo.

20TEN (2010) Y para cerrar esta serie de posts, otro retorno al sonido Minneapolis bastante más afortunado que MPLSound, concretamente a la era 1999. El aficionado más nostálgico posiblemente disfrute joyas como el inicio movidito con Compassion, la pseudosecuela de The Beautiful Ones Future Soul Song, enormes alegrías como Sticky Like Glue que bien podría haber sido un estupendo single, el falsete principesco en todo su esplendor en Walk in Sand y Sea of Everything o el Everybody Loves Me que bien podría haber sido una cara B del Controversy. El resto no pasa del aprobado raspado, si bien en lineas generales el disco da esperanzas a uno de que en años venideros aparezcan otros discos más redondos. Uno tiende a sospechar que Prince continuará por este sendero de nostalgia y que dificilmente reaparezca aquel artista que facturó no ya los clásicos discos de los 80, sino aquel del Love Symbol Album, Gold Experience o Rainbow Children. Pero puede dar la sorpresa cuando menos lo esperemos. Esperemos estar ahí para contarlo.

sábado, 7 de abril de 2012

Un repaso corto a la larga carrera (oficial) de Prince Rogers Nelson (1996-1999)

CHAOS AND DISORDER (1996) Hay quien dice que lo hizo malo aposta para librarse de la Warner. Incluso el propio Prince reconoció que lo hizo aprisa y corriendo con viejas composiciones que ya tenía en sus legendarios archivos. Aunque hoy olvidado, C&D es una inmejorable introducción para acercarse a Prince si a uno lo que le van son las guitarras, el rock y el blues. El tema del mismo título que el disco, I Like It There, Zannalee o The Same December son las canciones por las que tienen que ir de cabeza aquellos rockers de pura cepa mientras que a aquellos que no tengan predilección especial por las Fender tienen en el álbum cosas melosas como Into the Light o I Will. Más cercanas al universo púrpura son I Rock, Therefore I Am (con algo de scratch y la agradecida presencia de Rosie Gaines) y Dig U Better Dead. Lástima que el buen single Dinner with Delores se hundiera en listas para acabar de manera tan triste con la Warner. El cierre surrealista con Had U acaba por bajar algo la nota al disco pero no se fíen de los que les digan que es un bodrio: ya podían ser todos los finales con una discográfica ser así de desapasionados y malos. Me temo, eso sí, que Prince jamás dará su autorización para comercializar un Guitar Hero basado fundamentalmente en este disco. Con lo mucho que le gusta el dinero.

EMANCIPATION (1996) Comprendo que piense que tres discos de una hora cada uno de material nuevo son demasiado y que quitando canciones de relleno podría haber quedado un sólo álbum (o doble como mucho) magnífico. Y también entiendo que si se animó a escuharlo se haya quedado un pelín decepcionado sobre todo cuando su autor lo hypeó al máximo ("Quizás sea mi Ciudadano Kane"). Pero esta triple celebración de su libertad discográfica, su matrimonio con Mayte y el inminente nacimiento de su hijo (aunque tristemente acabó en tragedia al morir al poco de nacer) es de muy notable calidad en lineas generales y resulta un magnífico testimonio de la gran racha creativa de aquella época de Prince. Había temas donde se palpaba el resquemor contra la industria (White Mansion, Slave, Face Down), pero eso era de lo poco cabreado que estaba Prince en el disco. Diversión en Jam of the Year, Sex in the Summer, Get Yo Groove On, Style o Sleep Around, almíbar en One Kiss at a Time, Dreamin' About U, Saviour o Friend, Lover, Sister, Mother/Wife, joyas minimalistas del calibre de Soul Sanctuary, Let's Have a Baby o My Computer (con Kate Bush por allí), la sentida petición de reconciliación a Wendy & Lisa In This Bed I Scream, la despedida desoladora a Jonathan Melvoin (hermano de Wendy muerto por sobredosis) The Love We Make y, sorpresa sorpresa, versiones de otros artistas sabiendo lo poco que le gusta al de Minneapolis hacerlas en un disco de estudio: Betcha by Golly Wow!, I Can't Make U Love Me, La La La Means I Love U y el One of Us de Joan Osbourne. Más que Ciudadano Kane, dejémoslo en Mr. Arkadin.

CRYSTAL BALL/ THE TRUTH/ KAMASUTRA (1998) La idea, al menos sobre el papel, era muy buena: para evitar la proliferación de grabaciones piratas de sus temas inéditos, Prince decide obsequiar a sus fans con un triple CD de material que no vió la luz oficialmente. No sólo eso, sino que en el set venía incluido un nuevo disco de temas acústicos como regalo.Es más, en una época donde Internet aún estaba algo verde en lo que a ventas on line se refiere, él sería el primer gran artista que vendería este material a través de su página web. Los fans todo ilusionados y venga a pedir el disco por la red de redes. Los cuatro CDs les llegaron con muchos meses de retraso...y cuando ya estaban en las tiendas de discos. Añadan al agravio un diseño horrendo y sin letras ni tracklist (había que ir a la web a imprimirlo y cortarlo...) y, sobre todo, el hecho de que incluía remixes de temas antiguos muy innecesarios y paranoias varias como la improvisación de 15 minutos Cloreen Baconskin y ya se pueden imaginar los hermosos epítetos dedicados a la familia de Prince. Los temas inéditos "de verdad" consistían en los sobrantes de la época Sign O' The Times (Crucial, Dream Factory, Movie Star) y sobre todo de mediados de los 90 como el excelente reaggae Ripopgodazippa, Acknolwledge Me, la versión en directo del clásico principesco Days of Wild o la dulce balada hecha especialmente para su participación en el show de los Teleñecos She Gave Her Angels. The Truth resulta ser un muy apreciable postre con buenos temas como Circle of Amour, Dionne, Animal Kingdom o Man in a Uniform que quizás hubiera funcionado algo mejor si lo hubiera publicado por separado. Para intentar apaciguar los ánimos de los que ya habían pedido el set por Internet, Prince incluyó otro CD adicional: Kamasutra, la música instrumental que sonó en su boda con Mayte. Para olvidar. Y ya sé que un disco sólo por ese nombre tendría que ser bueno por narices.

NEWPOWER SOUL (1998) Aunque en la portada se anuncie como un disco de la New Power Generation, es de facto un disco de Prince que el de Minneapolis promocionó por activa y por pasiva en teles y magazines especializados (nunca dió tantas entrevistas como en aquella época). Pero los palos recibidos por crítica y público en general que ya veían en Prince a un frikazo acabado repercutieron en las ventas y hundieron aún más su ego. Y eso que había hecho un álbum diseñado para recuperar popularidad perdida y había buenos temas para escoger: Mad Sex, Shoo-Bed-Ooh, Push It Up!, Come On, la sobresaliente balada The One o la inquietante hidden track Wasted Kisses reciben de mi parte un thumbs up. Claro que por el otro lado tenemos cosas tan predecibles y por debajo de la calidad habitual como el tema del mismo título que el disco, la demasiado empalagosa hasta para Prince Until U're in my Arms Again, (I Like) Funky Music o las correctitas When U Love Somebody y Freaks On This Side. Menos mal que la gira que siguió al disco alegró más al de Minneapolis.

THE VAULT...OLD FRIENDS 4 SALE (1999) Para librarse por fin de los últimos flecos de su contrato con la Warner y sin mover un solo dedo para impedir su publicación sale a la venta un recopilatorio de 10 temas grabados entre 1985 y 1994 innecesario para el die hard fan que ya los consiguió por otros métodos pero que para el resto se puede considerar aceptable. Por allí andan la versión primigenia del 5 Women que luego cedería a Joe Cocker, la versión larga y jazzie de 8 minutos del She Spoke 2 Me cedido para la banda sonora de Girl 6 de su amiguete Spike Lee, el nightclubesco When the Lights Go Down de 7 minutos, la versión pulida en estudio y con la letra modificada de Old Friends 4 Sale (la original hacía referencia a problemas varios con la gente de su entorno circa 1986) y material de puro relleno. Sin embargo ahí están dos temazos que merecen mucho la pena: It's About That Walk, una delicia llena de buenas vibraciones y la balada con clase Extraordinary que cierra el disco. Pueden vivir perfectamente sin él aunque no sea del todo malo.

RAVE UN2 THE JOY FANTASTIC (1999) Esta vez nada podía fallar para volver a lo más alto. Tras contemplar como un Carlos Santana al que muchos daban ya por acabado regresó por todo lo alto con el disco publicado por Arista Records y lleno de cameos de otras estrellas musicales Supernatural, Prince se pone en contacto con el mandamás de Arista Clive Davis y llega a un acuerdo para publicar un álbum también lleno de estrellas (Chuck D, Gwen Stefani, Eve, Ani DiFranco, Sheryl Crow) y donde en los créditos de producción veíamos a "Prince" con su verdadero nombre. Lo que se diseñó para ser un retorno triunfal se convirtió en testimonio de lo poco que le quedaba a su matrimonio con Mayte en temas acusatorios como el I Love U, but I Don't Trust U Anymore, Silly Game, Man O' War o el single The Greatest Romance Ever Sold, buenos temas en general sobre todo el primero, interpretado a piano. Ya en tono más alegre tenemos Rave (tema para Batman rescatado para el proyecto), Undisputed, el dueto rocker con Gwen Stefani So Far, So Please que incomprensiblemente no fue single, la muy alegre Baby Knows con Sheryl Crow a la harmónica (Prince tuvo a bien incluir en el disco su propia versión bailonga de Everyday is a Winding Road), o el tema de autoafirmación con flirteos techno Strange But True. Para el final quedan la joya Wherever U Go, Whatever U Do que tiene un aire a sobrante de mediados de los 80 y el hidden track y homenaje a James Brown Prettyman, con la colaboración estelar del legendario Maceo Parker. Aún siendo mejor de lo dicho en un principio, el álbum se hundió en ventas con Prince ofreciendo un remix del mismo en su web, separándose de Mayte y anunciando que una vez libre del todo con la Warner volvía a su verdadero nombre. Carpetazo final para esos tiempos de "chaos and disorder".

lunes, 2 de abril de 2012

Un repaso corto a la larga carrera (oficial) de Prince Rogers Nelson (1990-1995)

GRAFFITI BRIDGE (1990) Demasiado animado tras arrasar con Batman, Prince lo intenta de nuevo en el cine con las promesas de hacer una especie de secuela de Purple Rain. Las cosas salieron igual de mal (o peor) que con Under the Cherry Moon. Y con el disco de la película en USA lo mismo. Quizás si hubiera prescindido de las apariciones de de The Time (Release It, Love Machine y el excelente The Latest Fashion), sus admirados y protegidos Mavis Staples (Melody Cool) y George Clinton y de la promesa Tevin Campbell (Round and Round) y el disco hubiera consistido únicamente en sus canciones (compuestas la mayoría desde tiempo antes de tener listo el disco) hubiera funcionado mucho mejor. Más vapuleado de lo que en realidad merecía, volvemos a encontrar gran calidad en la bluesy The Question of U, Elephants and Flowers, Joy in Repetition con una guitarra memorable, el dueto con Clinton We Can Funk, el buen single Thieves in the Temple o la solemne Still Would Stand All Time. Los problemas llegan con las mecánicas New Power Generation Partes I y II o la canción del mismo título que el disco que quiere recordarnos los musicales de Broadway y que acaba por ser de lo peorcito hecho por Prince. Quizás demasiado ambicioso hasta para el ego del protagonista de estos posts. Otra vez tendría que jugar sobre seguro para el próximo disco.

DIAMONDS AND PEARLS (1991) Y tan seguro tuvo que jugar que éste disco y sus singles se vendieron como rosquillas aliviando tensiones entre la Warner y Prince...por poco tiempo. Cuidadas composiciones, producción sobresaliente y riesgo cero para un muy disfrutable disco que sirvió de introducción a su nueva banda New Power Generation. Los singles Gett Off y Cream están hechos a posta para triunfar mientras que la balada que da título al disco es una maravilla a la que ayuda la presencia de Rosie Gaines. Money Don't Matter 2night con su aire reivindicativo y ambiente de club nocturno es una obra maestra que ha pasado desapercibida. Menos afortunados son los coqueteos con el rap cortesía de Tony M. en un intento por ganarse al público joven de aquel entonces con la simpática siendo benévolo Jughead o Push. Thunder (supuestamente inspirada en aquella mala noche donde decidió retirar el Black Album) y Daddy Pop son una correcta introducción al álbum. Insatiable es una predecible balada sensual marca de la casa que no pasa del aprobado raspado. Afortunadamente ahí tenemos la jazzie Strollin, el cierre con Live 4 Love o el sensacional himno optimista Willing and Able para elevar la calidad del disco. Fue su último momento de tranquilidad con la Warner antes de que llegasen tiempos turbulentos de "chaos and disorder".

THE LOVE SYMBOL ALBUM (1992) Si hay un disco donde Prince demuestra su versatilidad en todo tipo de géneros es sin duda en la que es su obra maestra de los 90. De nuevo con la New Power Generation, Prince arrasa con todo con la contundente My Name Is Prince, un "este soy yo" que aún hoy suena impresionante. El homenaje a James Brown Sexy M.F, las rompepistas The Max y The Continental, el reggae Blue Light, los flirteos con el techno I Wanna Melt With U, las baladas con el mejor falsete jamás registrado de Prince Sweet Baby, Damn U y And God Created Woman, delicias con cambios de ritmo como Love 2 the 9'S, singles como The Morning Papers o la apocalíptica 7, el homenaje al Bohemian Rhapsody de Queen 3 Chains O' Gold, divertimentos como Arrogance y The Flow o el cierre autobiográfico The Sacrifice of Victor forman parte de un álbum imprescindible entendido como una Ópera Rock con presencia de Kristie Alley que se desarrollaría con más profundidad en el video-colección de videoclips 3 Chains O' Gold. Aquí sería donde Prince entablaría relación con la bailarina de la banda Mayte García y que sería su musa en éste y más discos al mismo tiempo que comenzaría su legendario cabreo con la Warner, entre otros motivos, por la mala promoción del disco.

THE HITS 1 Y 2/ THE B-SIDES (1993) Después de tanto tiempo dando la tabarra, la Warner por fin tuvo su tan ansiado Greatest Hits de Prince. Claro que fue poco tiempo después del tan sonado cambio de nombre por un impronunciable símbolo producto de muchos factores demasiado largos de explicar para ser contados en esta serie de posts. Los dos discos de éxitos son buenas selecciones de lo más representativo de Prince, si bien al die hard fan le puedan saber a poco, aunque se incluyó una versión en directo del Nothing Compares 2 U que hiciera popular Sinead O' Connor y las inéditas Pink Cashmere, Pope y la joya Peach, un homenaje a Marc Bolan y T-Rex y su Get It On que sirvió de sintonía al menos ponzoñoso de los programas del corazón de este país. Lo verdaderamente interesante para el aficionado venía en el disco The B-Sides, las caras B de sus singles por fin disponibles en CD. Allí se encuentran aparte de las del Purple Rain joyas como Gotta Stop (Messin' Around), Shockadelica, She's Always in my Hair, How Come You Don't Call Me Anymore, la contribución a USA for Africa 4 the Tears in your Eyes o Another Lonely Christmas. Para el final el tema inédito Power Fantastic que supone una joyita. Seguramente ahora que Prince es independiente y ya no tiene que rendir cuentas a discográfica alguna resultará harto improbable que vuelva a dar su autorización para una recopilación de este calibre.

COME (1994) En un principio y como podemos ver en la portada el último disco con su nombre. Al menos hasta que su situación con la Warner se arreglase.Ventas malas y críticas peores mientras Prince arrasaba con el single independiente The Most Beautiful Girl in the World, lanzaba por fin el Black Album y se quejaba de que la Warner no le dejaba sacar al mercado el disco Gold ("el Purple Rain de los 90" afirmaba sin tapujos) con su simbolito. Con más calidad de lo dicho en su momento, Come se iniciaba con una infecciosa jam session de 11 minutos del mismo título que el disco para dar paso a las etéreas Space y Pheromone, el techno salvaje en Loose!, la denuncia contra abusos sexuales paternos (mucho se debatió sobre si el tema tenía componentes autobiográficos) Papa, cuestiones sobre la raza a todo ritmo con Race, la balada nightclub Dark, el experimento a capella Solo o el buen single Letitgo que no bastaron para triunfar aún siendo en general buenos temas. Impagable el broche final con Orgasm: sampleado del solo de guitarra distorsionado de Private Joy, olas del mar y una grabación de los 80 de Vanity ¿fingiendo? un orgasmo. Como para que le dé un día por husmear que hacía su ex-amante mientras ella intenaba salir del pozo. Más contentos tuvieron que estar los barceloneses cuando vieron en la contraportada a un Prince reflexivo enfrente de La Sagrada Familia.

THE GOLD EXPERIENCE (1995) Desde que Prince anunciase que tenía un disco llamado Gold que no le dejaban publicar hasta que eventualmente vió la luz con el nombre The Gold Experience, la expectación que rodeó este lanzamiento se desvaneció poco a poco, varios de los temas fueron sustituidos por otros y la producción del disco sufrió grandes modificaciones. ¿Sobreproducido? Es posible. Pero con todo, el álbum es otra maravilla de los 90 que debiera haber sido un superventas. Más miradas al mundo del sexo con la apertura P Control, el tema definitivo para strippers como así entendió el gran Paul Verhoeven al incluirlo en Showgirls 319 o la inmensa balada Shhh, números rockeros como Endorphinmachine o la excelente Dolphin, orgullo black powa con We March, otra versión del homenaje al sonido Philadelphia Most Beautiful Girl incidiendo en la batería, jams como Now o Billy Jack Bitch, el infravalorado tema en acústico Shy, el poderoso tema de (des)amor I Hate U y, para acabar, el Purple Rain de los 90 como había prometido Prince: la contundente e incomprensiblemente no un éxito Gold con el de Minneapolis de nuevo como guitar hero. Un excelente disco que, según como servidor tenga el día, lo incluiría en el top 5 principesco. ¿Quién dijo que los 90 fueron un desastre en lo artístico para Prince?